Blogia
Cosas Útiles

Regalo 5: ¿Pies?

Regalo 5: ¿Pies? Definitivamente mis pies son muy poco fotogénicos, aún no me decido a mostrártelos. Éstos son los días más improductivos de mi vida me la paso entre Sims autómatas, y decepciones múltiples. Cuando tenía como 15 años creía que tenía una especie de maldición: si alguien decía que iba a visitarme no debía salir al balcón porque esa persona nunca llegaría... ahora me pasa algo muy similar cuando me dicen "Ya te llamo para que nos veamos" si me quedo esperando la llamada cual adolescente, ésta nunca se da. Es lo más frívolo que tengo para decir hoy.

Me hacen falta ciertas alusiones a mi pelo que ahora no es tan negro y supongo que ahora no es tan largo...

10 comentarios

v -

vaya golpe a la nostalgía eso del rollito para introducir el dedo. lo había olvidado por completo. acabas de darle un know out a la mala memoria. pero, vamos, dejémonos de complejos, ¿has pensado lo de los pies?

la "tonta" ada -

La rebeldía de mi pelo no tiene razón de ser, es un pelo estúpido. Ahora es más café que negro, pero sigue siendo tantísimo, pesa, aún así se le puede hacer ese práctico rollito en donde podías introducir tu dedo. A mi también me gustaban esas tardes en donde estaba permitido ser tonto.

el bobo van -

pero pelo rebelde por imposición de la naturaleza femenina, o por cambios hormonales (espero que tu voz no sea ahora un vozarrón o una voz de motorcito)o sólo afloró tu verdadero pelaje, pequeño pony. si es así, dejame decirte que era algo que me esperaba mientras hablabamos de nada en las tardes, y es que tenías tanto pelo, ada, tanto pelo, y tan negro, y con ese olor a fresa pegado desde las entrañas, que hasta desbordaba por tus tontas palabras que hacían la vida tan hermosa, tan tolerablemente hermosa que la amenaza de que el pelo se desbordara no podía atemorizarme. cuentame cómo es ahora esa amenaza negra. también se extraña.

mi pelo -

la verdad es que tiene las mismas características de antes pero es que se ha revelado y no me obedece, aunque también está un poco más corto...
Se te extraña.

el pelo de ada -

Lo has cortado, lo teñiste de algún extraño color, ¿aún brilla y huele a fresa y tapa parte de tu rostro mientras sonríes? ¿todavía sonríes?

adilla -

Algo que me pasa a veces con el pelo es que me asusta, me sorprendo de ver una cosa tumultosa sobre mis hombros y grito, aunque hace ya un tiempo que no me pasa.

van -

háblame entonces sobre tu pelo, ahora no tan largo y no tan negro...

el-que-no-sabe-donde-vives -

siendo así las cosas, prefiero seguir ignorando donde vives. espero que no sea en otro continente (o en otro mundo o en el más allá o en las ruinas de la casa que viste arder en tu niñez). piensa en lo de los pies. no se trata de que sean o no fotogénicos. es más bien un asunto de tobillos, ada.

ada -

Creo que no es posible. ¿Sabes que ya no vivo allí?

van -

anoche soñé con usted. hoy pasé frente a su casa. no estabas en el balcón, supongo que no esperabas a nadie. te escribo para que nos veamos.